Pasaban los días
sin verlos,
sin sentirlos...
El dios del sueño
no me dajaba ver pues
aún despierto estaba
en un pozo sin fondo y
un cielo opaco.
Mi mundo interior
me buscaba como buscador
y tuve el atino de encontrar.
Todo ese tiempo perdido
se recuperó.
Tan rápido como el rayo,
el mundo entero
al alcance de mi mano.
Es fruto de mi pensamiento...
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1 comentario:
la mente lo puede todo!!
me gustó leerte!!
Un beso
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