martes, 28 de octubre de 2014

Mi partido político


A veces la sinceridad es dejar caer las cosas por su peso, a nuestra disposición de razonar y ver qué pasa. La sinceridad resulta un problema engorroso muchas veces y tenemos miedo del miedo. Le doy miles de vueltas a asuntos delicados con miedo a caer en los mayores temores. Poco a poco la madurez en nuestra conciencia nos quita el miedo a ser para SER con los pies en la tierra. Me ha costado miles de esfuerzos admitir lo más sencillo; donde la gente no se paraba por ser cosa natural.
Sin duda nos complicamos la vida y muchos problemas son castillos en el aire...¿Porqué no nos enseñan a pensar?, a tener la libertad del pensamiento que es el fruto de nuestra felicidad y realizarnos como personas.
Las próximas elecciones, me voto a mí, por rescatar todo lo que me han quitado...


1 comentario:

Tatiana Aguilera dijo...

Porque esta sociedad es una manada de ovejas y si una de ellas piensa o intenta pensar, la alejan o la destruyen, porque no es manejable, entonces: escribe y ejerce tu derecho a dimitir y pensar.
Un abrazo.